Cuando tenemos un diente torcido, algo bastante común en toda la población, nos preocupamos más por la imagen que ofrecemos que por lo que realmente significa esta molestia.
El hecho de poder sonreír simplemente es algo que las personas con dientes torcidos a veces dejan de hacer, y normalmente esto viene por la inseguridad de mostrar esa sonrisa. Es un problema estético en las personas adultas, que, en ciertas ocasiones tiene implícito algunas consecuencias en las funciones de la boca.
Es más habitual ver este “problema” en los niños, algo que hace que los padres nos preocupemos porque nuestros hijos tengan los dientes alineados de manera correcta.
Conviene también resaltar que tener los dientes torcidos puede producirse tanto en la dentadura de los adultos como en la aparición de los dientes de leche.
Causas de por qué tengo un diente torcido
El origen del por qué nuestros dientes están torcidos puede ser debido a varios motivos.
- Usar durante demasiado tiempo el chupete o biberón
- Chuparse el dedo
- Presionar con la lengua los dientes
- Aspectos genéticos
- Dientes retenidos que no han terminado de salir
- Muelas del juicio que provocan la alteración en la posición de los dientes
- Golpes o traumatismos que hayamos sufrido en la boca o la mandíbula
Todas estas causas pueden hacer que se modifique la posición de los dientes y de todas ellas la más frecuente es la herencia genética.
Es por ello, muy importante que en la medida de lo posible detectemos cuanto antes mejor la mala posición de los dientes y sea nuestro dentista de confianza quien analice el problema y nos ofrezca un tratamiento adecuado.
Existen diferentes tipos de tratamientos que pueden ayudar a posicionar de manera correcta los diente y así mejorar el aspecto de nuestra sonrisa.
Complicaciones que pueden darse al tener un diente torcido
- Dificultad en la higiene dental (lo que podría ocasionar caries en las piezas dentales)
- Problemas de tipo social para las personas con baja autoestima
- No poder masticar de manera correcta los alimentos, lo que derivaría en consecuencias gástricas
- Tensión en la mandíbula al no tener una mordida correcta, una malaoclusión puede llegar a ocasionar perdidas de piezas dentales
- Alteración del habla
Tratamientos para los dientes torcidos
En el caso de detectar a una temprana edad este problema, es importante el papel de los progenitores para comenzar un tratamiento lo antes posible, para corregir de manera eficaz la posición de las piezas dentales.
El tratamiento más habitual es la ortodoncia, es así como corregimos la posición incorrecta de los dientes devolviéndoles su estética y su función.
La ortodoncia se suele realizar con más frecuencia en los niños, la edad recomendable es a partir de los 12 años, aunque cada caso evidentemente varía. Es bastante habitual también que los adultos se hagan este tratamiento para evitar los problemas que anteriormente hemos citado.
Es un tratamiento largo que puede durar varios años, siendo el principal obstáculo de los pacientes a realizarlo, llevar el aparato en la dentadura. No obstante en los últimos años este tratamiento no sufre de tanto rechazo debido a las nuevas tecnologías en el campo de la ortodoncia.
El uso de los brackets (en este artículo que redactamos hace tiempo puedes informarte de los distintos tipos). Estos aparatos realizan la presión adecuada en las piezas dentales para que éstos se recoloquen de la manera adecuada.
Actualmente hay aparatos que pasan desapercibidos y realizan su función de la misma manera a la de los aparatos tradicionales.